TENORIO, MIGUEL ANGEL
No es un cuento clásico aunque parezca. Muy por el contrario: el príncipe debe trabajar y no tiene un enorme castillo con jardín, sino sólo macetas en su balcón. Y la princesa. Ay, ella sí sueña con un príncipe como los de antes. Si no puedes imaginar qué sucederá, léelo y lo sabrás.